El 4 de agosto, el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, la Fundación Friedrich Ebert, el IADE y el Grupo de Trabajo CLACSO Seguridad Social y Sistema de Pensiones organizaron el Tercer Encuentro: “El desafío social en tiempos de pandemia. ¿Cambios estructurales en los regímenes de bienestar?” Los ponentes fueron: Fernanda Raverta, Directora Ejecutiva de la ANSES. Simone Cecchini, Oficial a cargo División de Desarrollo Social de la CEPAL. Karina Batthyány, Secretaría Ejecutiva de CLACSO. Svenja Blanke, Representante Argentina FES y Directora de la revista «Nueva Sociedad». Moderó: Nicolás Dvoskin, Instituto Argentino para el Desarrollo Económico.

Al término del conversatorio, Karina Batthyány fue entrevistada por CLACSO.TV.

Karina Batthyány comentó que “lo que estuvimos conversando en el encuentro fue específicamente sobre los regímenes de protección o de bienestar social. Esta es una idea que me importa destacar hoy porque justamente si hay algo que quedó en evidencia con esta pandemia es la urgencia de acelerar estos procesos de establecimiento de sistemas de bienestar o protección social en nuestra región. Algo que en general en América Latina y el Caribe es una deuda desde hace mucho tiempo, y justamente además en América Latina y el Caribe que es la región más desigual y que teníamos esas desigualdades tan profundas marcadas en nuestra región que se evidenciaron y que se potenciaron en estos 5 meses aproximadamente que llevamos en la situación de pandemia. Donde algunos elementos –preexistentes, por supuesto– se hicieron más visibles y se profundizaron. ¿De qué estoy hablando? Pongamos dos ejemplos. Quizás uno muy visible: sistemas de salud, protección en términos del acceso universal para todos y para todas a sistemas de salud de calidad, que quedó muy clara las diferencias en el marco de esta crisis sanitaria entre los países latinoamericanos y caribeños y, por supuesto, también a nivel mundial, pero para concentrarnos en nuestra región. Donde aquellos países con mayores fortalezas en sus sistemas de salud quizás pudieron responder de una manera bien diferente a aquellos países con sistemas de salud más endebles; y cuando hablo de sistemas de estoy hablando de sistemas de salud públicos y de alcance universal para todos y para todos. Entonces uno de los elementos que seguro que todos y todas lo vieron en su realidad cotidiana en estos 5 meses, son los sistemas de salud. Pero hay otro componente que también quedó muy evidenciado en el marco de esta pandemia y que no era tan visible y que quizás a partir de ahora se empieza a considerar más, tiene que ver con la cuestión del cuidado. Y por qué traigo del cuidado en este momento, porque el cuidado es, debe ser uno de los pilares del bienestar social. Y preguntémonos qué es lo que más cambió en nuestras vidas en estos meses: nuestra vida cotidiana, nuestra interacción en los espacios domésticos y cotidianos, donde se hizo evidente la necesidad del cuidado para el bienestar de todas las personas, y no sólo la necesidad del cuidado sino también quiénes somos habitualmente las que nos ocupamos –por la división sexual del trabajo vigente en nuestras sociedades– de esta situación de los cuidados. Esos dos elementos creo que son importantes de mencionar”.