Salvia: «Necesitamos una mirada integral de por dónde viene el modelo de desarrollo pos pandemia»

Salvia: «Necesitamos una mirada integral de por dónde viene el modelo de desarrollo pos pandemia»

Una mirada integral de por dónde viene el modelo de desarrollo pos pandemia para América Latina

En el marco del Ciclo de Conversaciones virtuales sobre Seguridad Social y Sistema Previsional organizado por CLACSO, Fundación Friedrich Ebert, IADE y el Grupo de Trabajo CLACSO Seguridad social y sistemas de pensiones, CLACSOTV entrevistó a Agustín Salvia, del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina y co-coordinador del Grupo de Trabajo CLACSO Heterogeneidad estructural y desigualdad social.

Para Salvia, “América Latina es un continente atravesado por la desigualdad y la pobreza más allá de los progresos que ocurrieron en términos generales durante la primera década del siglo 21; y la segunda década fue una década postergada, perdida y con fuertes deterioros en los avances que se habían conseguido. Nunca dejó de ser una región con muchas desigualdades estructurales y que se expresan en materia de pobreza por ingresos, privaciones, pero que también se traducen en aspectos sustantivos de la vida cotidiana, en la educación, la calidad de la educación, de cómo se dividen o se fragmentan y segmentan los sistemas educativos, los sistemas de salud, los sistemas de empleo. Cómo los sistemas productivos resultan ser el sistema fuertemente heterogéneos que dan distintas calidades de empleo, distintos sistemas de protección y de seguridad social. Si bien es cierto que América Latina ha venido progresando en este sentido, también es cierto que Argentina durante los últimos 30 años experimentó fuertes crisis, que tendieron a un retroceso. Y el último período, ya para para acercarnos a la etapa de los últimos años, 3 o 4 años, con pronóstico de crecimiento muy bajo para América Latina, con aumento de la pobreza, incluso de la desigualdad, Argentina no estuvo fuera de ese contexto en el contexto global, pero también a partir de sus propias políticas que generaron fracasos en materia de crecimiento y un deterioro en términos de estancamiento, inflación, que nos dejó con niveles de pobreza muy altos. Calculemos que para el Instituto Nacional de Estadísticas, el último trimestre del año 2019 terminó con 38,4% de pobres en Argentina. Tal vez no es la medida comparable con otros países latinoamericano, pero significa que cuando ingresó el Gobierno de Mauricio Macri, el último Gobierno, teníamos 29 o 30% de pobreza y ya llegamos a ese 38,4 en el último momento del período político. En ese contexto vino el covid-19, el coronavirus, con un efecto en términos sanitarios que inicialmente no fueron tan importantes en términos de la virulencia inicial de lo que venía ocurriendo en Europa o en Asia, pero la política de cuarentena puso un límite más o menos generalizado en América Latina, con distintos matices, puso un límite, una barrera de contención al avance de esta pandemia, generando condiciones de aislamiento y de protección de las poblaciones a veces no las más vulnerables, a veces sí. Pero básicamente a que a través del aislamiento, una herramienta relativamente primitiva, el aislamiento forzado y obligatorio nos colocara en una situación de protección para la no contaminación, para la no expansión de la enfermedad. No era una medida correctiva, no era una medida superadora, era una medida de protección, y por lo tanto la enfermedad avanzó. Y junto con la enfermedad también avanzó la crisis económica. De economías a veces con mayores recursos y otras con menos, pero con recursos limitados en cualquier caso para países subdesarrollados, con muy pocas posibilidades de intervenir para cuando uno detiene la economía, de dar contención a los sectores informales, a los que ya eran pobres. Porque no eran pobres porque en todo caso no trabajasen o no recibieran suficientes ingresos vía programas sociales –porque en Argentina el 30% de la población tiene hoy por hoy un programa social de asistencia, de protección social–, sino porque cuando uno detiene la economía en estas economías segmentadas y fragmentadas, produce un deterioro profundo. En primera instancia, del sector informal, de quien tiene un trabajo de changas o actividades día a día, a partir de interacciones en el espacio público, generando bienes y servicios para los sectores populares en mercados informales. A este shock el Gobierno argentino como otros países latinoamericanos le generaron políticas de asistencia.”

Organizan:
CLACSO
Fundación Friedrich Ebert
IADE
Grupo de Trabajo CLACSO Seguridad social y sistemas de pensiones